LA AGONÍA DEL EJÉRCITO ROMANO OCCIDENTAL

Tras la gran victoria obtenida a finales del siglo IV por un conglomerado de pueblos germánicos donde los Visigodos llevaban la dirección frente al Ejército Romano Oriental en la batalla de Adrianópolis; donde el propio emperador Valente encontró la muerte la Dirección Militar Romana intentó adaptarse a las circunstancias.
En esta batalla de Adrianópolis combatieron por última vez las legiones a la antigua usanza.
Curiosamente el Imperio Romano Oriental logró sobrevivir a pesar de haber encajado la derrota mas contundente; derrota que la otra porción occidental nunca sufrió en el campo de batalla en semejante magnitud.
Una confluencia de problemas se abatían sobre el Imperio y su ejército haciendo difícil una solución ya que los problemas eran de diverso origen y naturaleza provocando una crisis estructural. Vamos a intentar arrojar un poco de luz sobre cuestión tan compleja y debatida.
En primer lugar es claro una disminución del patriotismo, la disciplina y la capacidad de sufrimiento de los soldados y oficiales romanos consecuencia de la Pax Romana. Cuando uno está en la cúspide es normal que se relaje, que disfrute de lo conseguido y se limite a conservarlo.
Los romanos "conquistaron el mundo" y en un momento dado cesó su expansionismo acantonando sus fuerzas en los limes.La última gran conquista fue la Dacia efectuada por el Emperador Trajano. Desde entonces la principal fuente de ingresos de un Imperio prácticamente agrícola cual era el botín de conquista se esfumó provocando una asfixia de impuestos para el sostenimiento del aparato estatal.
El Imperio Romano Occidental sobre todo y el Oriental en menor medida sufrió un empobrecimiento que se refleja en el aparataje militar del ejército cada vez de menor calidad. Las armaduras, los cascos de finales del siglo IV al V reflejan la decadencia de la indumentaria. Por otra parte los pueblos germanos van alcanzando una sofisticación jerárquico social y militar mucho mayor que les convierte en unos enemigos cada vez mas temibles con innovaciones tecnológicas como el estribo que dota a la caballería de una mayor acometividad.
El recuerdo de las otrora temibles legiones gravita aún sobre los pueblos germanos tantas veces escarmentados por Roma y que durante siglos fueron contenidos en el frente del Rhin y el Danubio. Las legiones fueron un muro infranqueable con grandes victorias por parte Imperial y algún descalabro como la batalla de Teoteburgo.
Durante el siglo III el Imperio estuvo a punto de desaparecer debido a las guerras civiles y el periodo de anarquía militar; sin embargo al tensionar al ejército debido a las querellas intestinas una serie de emperadores enérgicos los Ilirios lograron mantener el Imperio prácticamente intacto.
El siglo IV parecía la consolidación tras aquella grave crisis pero en realidad era el preludio de una terrible época, la calma que precede a la tempestad.
En efecto al no poder sostener el ejército por falta de paga y por un desdén romano al servicio militar se empiezan a emplear cada vez en mayor número a foederati germanos que van a barbarizar al ejército Imperial a la vez que se romanizan.
Un ejemplo muy claro lo tenemos en el gran general Flavius Aetius " el último romano" hijo de un germano y una noble italiana. Los foederati son mucho mas baratos; utilizan las técnicas de combate propias de los enemigos de Roma que se han venido mostrando superiores en los estertores del siglo IV. Recordemos como los romanos van dando cada vez mayor importancia a la caballería pesada tipo Catafractarios y Brucelarios copiados de los Persas Sassánidas en un intento de contrarrestar a los pueblos bárbaros.
Sin embargo estos Foederati que lograron mantener la agonía del Imperio otro siglo mas, prácticamente fueron una clave del derrumbe del Imperio ya que la reacción del nacionalismo romano haciendo la plebe una gran masacre de dichas tropas en sus acuartelamientos provocó que se echaran en brazos mayoritariamente de Alarico al que veían como un protector.
Desde antes de Constantino los últimos emperadores fueron paulatinamente germanizando el ejército; Constantino el Grande revolucionó al Ejército Imperial jibarizando a las legiones estacionadas en la frontera de tal manera que perdieron la mayor parte de su capacidad combativa quedando relegadas a una especie de guardas fronterizos acantonados en posiciones estáticas; simultáneamente creó dos fuerzas móviles el ejército de campaña o Comitatenses de 50.ooo efectivos cada uno; uno para taponar brechas en la parte Occidental y el otro en la Oriental. Ello permitió un mayor control de los emperadores sobre las legiones y sus generales que durante el siglo III habían sido proclamados emperadores y antiemperadores ya que dichas fuerzas móviles estaban en retaguardia y por lo tanto el Emperador las controlaba mas férreamente. Sin embargo el precio fue hacer mucho mas vulnerables las fronteras ya que los limitanei solo podían obstaculizar a los invasores. Asi pues la crisis económica, la estrategia errónea de Constantino, el declinamiento del ejército romano y la germanización de sus fuerzas cada vez mas escasas y peor dotadas, la crisis poblacional del Imperio, el carácter prácticamente agrario con muy pocas innovaciones tecnológicas en todos los campos incluido el militar, el cristianismo y su influencia en el desmoronamiento de los pilares tradicionales de la fuerza romana patriotismo, crueldad, veneración a los antepasados y al emperador etc y la aparición de los Hunos que van a provocar el pánico entre los germanos y un efecto dominó asi como una serie de decisiones fatídicas en momentos claves como la matanza de los foederati, el asesinato de Aetius, la falta de socorro a Roma varias veces sitiada y que cae en el 410, el paso de los vándalos a Africa tras la derrota del ejército de Castinus en la Península y la muerte de Mayoriano asesinado; el último emperador capaz va a provocar el hundimiento de la mitad del Imperio y la caída de la ciudad Eterna. Sin embargo y contrariamente a las estrambóticas tesis de la historiografía francesa el Imperio sobrevive con la Nova Roma; Constantinopla, ya que dicho imperio siempre se consideró romano como no podía ser de otra forma aunque tuviera una enorme influencia griega. La parte superviviente del Imperio Romano mal llamado luego Bizantino por influencia de los historiadores franceses va a reconquistar de los germanos Italia, el norte de Africa y una porción suroriental de la Península Ibérica y no caerá hasta muchos siglos después a manos de los turcos.

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